El Meadows Museum presenta obras de Joaquín Sorolla y Bastida (1863-1923)
como parte de las celebraciones del “Año Sorolla” en España y América.
Del 17 de septiembre de 2023 al 7 de enero de 2024
La exposición presenta una selección de obras maestras
con los temas preferidos de Sorolla que se encuentran
en las colecciones americanas.
SOROLLA: EL MAR Y SU GENTE
La paleta luminosa de Sorolla es tan deslumbrante que puede distraer
al observador de la magnitud de otro de los grandes logros de su pintura,
donde consigue captar magistralmente, como una instantánea,
un momento en la vida de sus personajes y el entorno que los rodea.
Las obras de Sorolla son una pintura envolvente en movimiento.
Playa de Valencia, 1908
(Beach of Valencia, 1908)
Joaquín Sorolla y Bastida (Español, 1863–1923)
Óleo sobre tela, 26 x 37 ¾ in. (66 x 96 cm). Cristina H. Noble.
Foto: Archivo personal de Blanca Pons-Sorolla, Madrid
Sorolla y la poesía de las velas. Hay una fascinación de Sorolla por las velas de los barcos que consigue convertir en una poesía visual donde percibimos la brisa marina y las velas que danzan a su ritmo. En esta obra, Sorolla despliega todos los encantos de la vela, cuando retrata un grupo de barcos el paisaje se convierte en un ballet donde la prima donna está en primer plano admirándose en el agua.
Detalle de Playa de Valencia, 1908
Detalle de Playa de Valencia, 1908
Playa de Valencia, 1908
(Beach of Valencia, 1908)
Joaquín Sorolla y Bastida (Español, 1863–1923)
Óleo sobre tela, 26 3/8 x 38 1/4 in. (67 x 97.2 cm). Cristina H. Noble.
Foto: Archivo personal de Blanca Pons-Sorolla, Madrid
Esta obra contiene otra de sus magistrales composiciones
donde Sorolla muestra su extraordinario dominio del carácter
de los niños que son otro de sus grandes temas pictóricos.
Detalle de Playa de Valencia, 1908
El bote blanco. Jávea, 1905
(The White Boat. Jávea, 1905)
Joaquín Sorolla y Bastida (Español, 1863–1923),
Óleo sobre tela. 21 1/8 x 59 in. (105 x 150 cm). Cristina H. Noble.
Foto: Archivo personal de Blanca Pons-Sorolla, Madrid
En muchas de sus obras, en una vista cercana del cuadro
se percibe la trama del lienzo, lo que demuestra su extrema habilidad
en pintar con una sola pincelada precisa y vigorosa.
Detalle de El bote blanco. Jávea, 1905
Niños en el mar, Playa de Valencia, 1908
(Children in the Sea, Valencia Beach, 1908)
Joaquín Sorolla y Bastida (Español, 1863–1923),
Óleo sobre tela, 31 7/8 x 41 ¾ in. (81 x 106 cm). Colección privada, Europa.
Foto: Archivo personal de Blanca Pons-Sorolla, Madrid
La sensación de cuerpos mojados adquiere un realismo insuperable
en la pintura de Sorolla. Otra demostración de su magistral técnica.
Detalle de Niños en el mar, Playa de Valencia, 1908
Escena del puerto de Valencia, 1904
(Scene of the Port of Valencia, 1904)
Joaquín Sorolla y Bastida (Español, 1863–1923)
Óleo sobre tela, 18 1/2 x 29 in. (47.2 x 73.5 cm). Colección de Debbie Turner.
Foto: Archivo personal de Blanca Pons-Sorolla, Madrid
Detalle de Escena del puerto de Valencia, 1904
Niños bañándose entre las rocas. Jávea, 1905
(Children Bathing among the Rocks, Jávea, 1905)
Joaquín Sorolla y Bastida (Español, 1863–1923)
Óleo sobre tela, 13 x 24 ¾ in. (33 x 62.8 cm). Colección privada, Europa.
Foto: Archivo personal de Blanca Pons-Sorolla, Madrid
Otra de sus elaboradas composiciones para una serie
de cuadros de bañistas entre las rocas.
Valencia, dos niños en una playa, 1904
(Children on the Beach: Study for “Summer”, 1904)
Joaquín Sorolla y Bastida (Español, 1863–1923)
Óleo sobre tela, 29 3/4 x 41 1/2 in. (75.5 x 105.5 cm).
Guggenheim Partners Art Holdings, LLC.
Foto: Archivo personal de Blanca Pons-Sorolla, Madrid
Una de las obras más tiernas de Sorolla en la que presenta
una escena donde se percibe el amor filial.
Detalle de Valencia, dos niños en una playa, 1904
Playa de Biarritz, 1906
(Beach of Biarritz, 1906)
Joaquín Sorolla y Bastida (Español, 1863–1923)
Óleo sobre tabla, 8 7/8 x 7 1/8 in. (18 x 22.5 cm).
Emi Knight, Maximilian Knight, and W. Wilder Knight II. Foto: Joerg Lohse
Esta obra aparentemente menor es una de las obras maestras de la exposición.
Sorolla elige un punto de vista inusual para mostrar la animación de la playa
y la actividad de cada personaje se adivina, a pesar de estar sugerida
con pinceladas muy elementales. Los bocetos de Sorolla fueron
muy apreciados y un rotundo éxito de ventas.
Retorno de las barcas. Valencia, 1907
(Return of the Boats, Valencia, 1907)
Joaquín Sorolla y Bastida (Español, 1863–1923)
Óleo sobre tela, 36 1/8 x 44 ¼ in. (91.8 x 112.5 cm). Colección de Debbie Turner.
Foto: Archivo personal de Blanca Pons-Sorolla, Madrid
Volviendo de pescar.
Los bueyes sacan las barcas del agua para dejarlas varadas en la playa.
Pescadores, animales y embarcaciones descansarán hasta mañana.
Barcas, Playa de Valencia, 1908
(Beach of Valencia, Boats, 1908)
Joaquín Sorolla y Bastida (Español, 1863–1923)
Óleo sobre tela, 18 7/8 x 23 1/4 in. (48 x 59 cm). Colección de Debbie Turner.
Foto: Archivo personal de Blanca Pons-Sorolla, Madrid
Playa de Valencia, 1904
(Beach of Valencia, 1904)
Joaquín Sorolla y Bastida (Español, 1863–1923)
Óleo sobre tela, 24 1/2 x 26 in. (62 x 66 cm). Karen W. Davidson.
Foto: Archivo personal de Blanca Pons-Sorolla, Madrid
Un tema insólito en la pintura de Sorolla.
Un mar embravecido sirve de marco a un solitario paseante
sumido en sus pensamientos.
SOROLLA: SUS ESTILOS EN EL RETRATO
La exposición exhibe retratos que son una representación
de los diferentes estilos en los que Sorolla podía pintar a un personaje.
1897, Retrato de las hijas de Rafael Errázuriz
(1897, Portrait of the Daughters of Rafael Errázuriz)
Joaquín Sorolla y Bastida (Español, 1863–1923)
Óleo sobre tela, 89 1/4 x 54 ¾ in. (226.7 x 139.1 cm). Nancy e Ira Koger Trust, Florida.
Cortesía de Mark Murray Fine Paintings, New York.
Foto: Cortesía de Mark Murray Fine Paintings, New York
En esta obra Sorolla realiza otro de sus homenajes a Diego Velázquez
introduciendo discretamente su propio retrato en el espejo.
1903, El Rey Don Alfonso XIII, estudio para el cuadro de “La Regencia”
(1903, King Alfonso XIII, Study for the Painting “The Regency”)
Joaquín Sorolla y Bastida (Español, 1863–1923)
Óleo sobre tela, 18 7/8 x 32 ¼ in. (48 x 82 cm)
Cristina H. Noble. Foto: Juantxo Egaña
1903, Elenita vestida de menina
(1903, Elenita Dressed as a Menina)
Joaquín Sorolla y Bastida (Español, 1863–1923)
Óleo sobre tela, 41 1/8 x 22 in. (107 x 56 cm). Colección privada, Europa.
Foto: Archivo personal de Blanca Pons-Sorolla, Madrid
Se trata de un cuadro muy importante porque inicia una decidida evolución de su estilo. La extrema energía, rapidez y audacia con que está ejecutado este cuadro, anuncia la intensidad de la pincelada en sus obras futuras. Sólo otros dos artistas en la historia se han atrevido con esta enérgica espontaneidad de ejecución: el flamenco Frans Hals (1582-1666) y el italiano Giovanni Boldini (1842-1931).
1909, Retrato de Esperanza Conill de Zanetti
(1909, Portrait of Esperanza Conill de Zanetti)
Joaquín Sorolla y Bastida (Español, 1863–1923)
Óleo sobre tela, 61 1/4 x 48 7/8 in. (155.5 x 111.5 cm)
Jaime L. Ponce de Leon. Foto: Leon Gallery
1910, Juan Ángel, Zarauz
(1910, Juan Ángel, Zarauz)
Joaquín Sorolla y Bastida (Español, 1863–1923)
Óleo sobre tela, 21 7/8 x 33 ½ in. (55 x 85 cm).
Cristina H. Noble. Foto: Enrci Arimany
Esta obra muestra la extrema sensibilidad de Sorolla para penetrar en la
personalidad del retratado. La austeridad de la paleta y los escasos detalles
reflejan el espíritu adusto de los hombres de la región.
SOROLLA: SU VISIÓN DEL PAISAJE
1904, Camino de adelfas
(1904, Oleanders Path)
Joaquín Sorolla y Bastida (Español, 1863–1923)
Óleo sobre tela, 24 ½ x 30 in. (62 x 76 cm). Colección privada.
Foto: Archivo personal de Blanca Pons-Sorolla, Madrid
Sorolla conoció estas flores realizando uno de sus paisajes
y se enamoró de ellas hasta el punto de cultivarlas
en el jardín de su residencia madrileña.
c.1918, Detalle del jardín de la Casa Sorolla
(c.1918, Detail of the Garden of the Sorolla House)
Joaquín Sorolla y Bastida (Español, 1863–1923),
Óleo sobre tela, 37 3/4 x 25 1/8 in. (96 x 64 cm).
Colección privada, Europa. Foto: Archivo personal de Blanca Pons-Sorolla, Madrid.
1905, Puerto de Jávea
(1905, Port of Jávea)
Joaquín Sorolla y Bastida (Español, 1863–1923)
Óleo en tela sobre tabla, 5 1/8 x 5 7/8 in. (13 x 15 cm). Colección privada.
Foto: Archivo personal de Blanca Pons-Sorolla, Madrid
1906, Sombra del puente de Alcátrana
(1906, Shadow of the Alcátrana Bridge, Toledo)
Joaquín Sorolla y Bastida (Español, 1863–1923)
Óleo sobre tela, 26 x 36 7/8 in. (66 x 93.5 cm). Cristina H. Noble.
Foto: Archivo personal de Blanca Pons-Sorolla, Madrid.
SOROLLA: EL ARTISTA, EL HOMBRE
Joaquín Sorolla nació en Valencia el 27 de febrero de 1863, sus padres murieron en 1885 cuando Sorolla tenía 18 meses”. Fue acogido con su hermana por su tía Isabel. El marido de Isabel era cerrajero e intentó enseñar el oficio a Joaquín, pero su obsesión era la pintura y se matriculó en la Escuela de Artesanos de Valencia para aprender dibujo.
En 1885, cuando Sorolla tenía 18 años y su genio empezaba a manifestarse, decidió marcharse a París, donde entró en contacto con los impresionistas y otros artistas de vanguardia.
En la década de los 90, exponiendo en París, adquirió notoriedad en toda Europa y un gran reconocimiento internacional.
En 1909, a instancias del gran mecenas Archer Milton Huntington, inauguró su exposición en la Hispanic Society de Nueva York, lo que le permitió iniciar una exitosa carrera en Estados Unidos.
En la década de 1910 su salud empezó a flaquear, sufría frecuentes mareos y en 1920 sufrió una hemiplejía que mermó drásticamente sus facultades y le impidió seguir pintando.
En el catálogo de la exposición se describe detalladamente su extraordinaria vida y sus éxitos.
Sorolla por él mismo
Como dijo Sorolla en 1912 en una entrevista para la revista neoyorquina Art and Progress: “La luz es la vida de todo lo que toca. . . . ‘La lumière c’est la vie’, por lo tanto, cuanta más luz haya en los cuadros, más vida, y más verdad, y más belleza”.
En otra ocasión, el pintor también explicó cómo el simple movimiento continuo del sol cambia la apariencia de las cosas: “Hay que pintar deprisa, ¡por lo mucho que se pierde, que es fugaz y que nunca se vuelve a encontrar!”.
Sorolla se convirtió en lo que quería ser: “un pintor y nada más que un pintor”, según sus propias palabras. Vivió para su pintura y para su familia. Se entregó por completo a cada obra que pintaba con la pasión de un enamorado.
Sorolla por su mujer
En una de sus cartas, la esposa de Sorolla, Clotilde, se quejaba de su eterna “rival”, la pintura, al tiempo que deseaba que su marido nunca perdiera su devoción por la actividad que para él significaba “todo en este mundo”. La pareja compartió un intenso amor a lo largo de su vida, como atestiguan las 2000 cartas que se escribieron mutuamente.
Sorolla según los criticos
Henri Rochefort En su artículo de 1906 “Un astre qui se lève”, Henri Rochefort, periodista conocido por su independencia de criterio, comentaba su visita a la exposición de Sorolla en la Galerie Georges Petit de París: “Ha nacido un pintor magnífico. Por desgracia, no fue en Francia… No conozco ningún otro pincel que contenga tanto sol… La pintura de este artista no tiene nada que ver con el impresionismo, pero es increíblemente impresionante”.
Ramiro de Maeztu. Un artículo del crítico español Ramiro de Maeztu de 1908, tras la única exposición de Sorolla en Londres, es efusivo en sus elogios: “Este hombre debe tener la codicia de querer pintarlo todo; la pasión de sorprender todos los aspectos de la naturaleza, incluso los más furtivos e inestables…”.
“Estos aspectos fugitivos sólo podían ser reproducidos por el pincel rápido y seguro de Sorolla. Este es su arte; nadie puede superarle en eso. Nadie tiene en su paleta una síntesis más preparada de la primera visión de las cosas.”
“Este hombre tiene el extraño poder de pintar en pocas horas todo lo que se le pone delante y de reproducirnos la ilusión de la vida…”
Sorolla según sus admiradores
Archer M. Huntington. Al término de la exposición de 1909 en Nueva York, Archer M. Huntington, igualmente encantado, escribió a su madre: “En todas partes se respiraba un aire milagroso. La gente citaba cifras de asistencia. Se hablaba eternamente de la ‘luz del sol’. Nunca había ocurrido nada parecido en Nueva York. Ohs y Ahs manchaban los suelos de baldosas. Los automóviles bloqueaban la calle”.
Entrevista a Blanca Pons-Sorolla
Renombrada estudiosa de Sorolla, comisaria de la exposición y bisnieta del artista
Fotos: Paloma “Hiranda”
PATRONS: Usted ha sido entrevistada por la prensa más importante del mundo. ¿Cuál es la pregunta que le hubiera gustado que le hicieran sobre Sorolla y que nadie le ha hecho?
BLANCA: No se me ocurre, a Sorolla le han preguntado de todo.
PATRONS:¿Cuáles son las obras maestras imprescindibles que deberían figurar en una exposición antológica sobre Sorolla y que mejor le representarían?
BLANCA: Básicamente tienen como ejemplo la exposición de la National Gallery de Londres en 2019, que reunió todos los grandes premios, aunque faltaron algunas obras para mí fundamentales como “Atardecer”, “Verano” o “Clotilde paseando por los jardines de La Granja”, que no pudieron estar y que de momento va a ser muy difícil que aparezcan en exposiciones.
En cualquier caso, Sorolla tiene una producción tan amplia y buena que no es difícil hacer una antología de gran calidad en función de lo que sea posible en cada momento. Por supuesto, será necesario un patrocinador potente.
Lo que será irrepetible es una retrospectiva como la del Museo del Prado en 2009. Entonces se dieron una serie de circunstancias que no se volverán a repetir. Al menos así lo creo yo.
PATRONS: Los museos de todo el mundo están sufriendo una gran transformación ¿Cómo cree que debería actualizarse museísticamente el Museo Sorolla de Madrid?
BLANCA: En estos momentos está pendiente de terminar la ampliación, algo que era muy necesario, lo que supondrá una reorganización de los espacios. Cuando esté terminado y reorganizado podremos dar nuestra opinión.
En cualquier caso, no hay que olvidar su carácter de Casa-Museo que hay que preservar, y su condición de edificio histórico y jardín que limita determinadas actuaciones. Los planteamientos que se hagan tendrán que basarse en no perder el carácter que se ha mantenido hasta ahora.
PATRONS: ¿Qué opina de las exposiciones inmersivas que se están celebrando en todo el mundo con la obra de grandes maestros de la pintura?
BLANCA: Existe el peligro de olvidar lo importante que es ver y emocionarse con la obra original. Para mí, siempre que se haga muy bien y con la máxima calidad, puede ser un buen complemento, pero nunca sustituirá la maravilla de una exposición con obras originales.
PATRONS: Las exposiciones con obras figurativas se convierten en “éxitos de taquilla” si sus contenidos son excelentes y se comunican bien ¿Cuál es la razón de que no se celebren más exposiciones de grandes maestros?
BLANCA: Supongo que es la moda y la política cultural…
PATRONS:¿Existen proyectos para promover exposiciones de Sorolla en todo el mundo?
BLANCA: Que yo sepa en este momento sólo la del Meadows Museum de Dallas
PATRONS: ¿Qué facilidades le da para su trabajo ser bisnieta de Sorolla?
BLANCA: Soy una de las muchas bisnietas de Sorolla, y lo único que siento es una mayor responsabilidad por hacerlo bien, por estar a la altura que mi bisabuelo se merece.
PATRONS: ¿En qué fase de realización se encuentra el Catálogo Razonado de la obra de Sorolla que está preparando, hay alguna fecha prevista?
BLANCA: Los dos primeros volúmenes con las 2.100 obras pintadas desde sus inicios hasta 1903 inclusive están listos. Sólo están pendientes del trabajo de edición y publicación. Lo que hace falta es conseguir uno o varios patrocinadores para ello. La idea siempre ha sido publicarlas al mismo tiempo.
De las dos siguientes, que abarcan las obras pintadas entre 1904 y 1920, año en que dejó de pintar, tengo listas 1.100 fichas de las 2.140 obras. De ellas, 1.040 son del tercer volumen y 60 del cuarto.
Aún me quedan 1.100 fichas por hacer, pero el “Año Sorolla” ha detenido drásticamente mi trabajo con el catálogo razonado, algo que espero retomar el año que viene. La idea, como en el caso anterior, es publicarlos al mismo tiempo.
COMENTARIOS
Amanda W. Dotseth
Linda P. y William A. Custard Directora del Museo Meadows
“Esta exposición ofrece una mirada única a la obra de Sorolla procedente de colecciones privadas norteamericanas. Gracias a un grupo de exquisitas pinturas raramente vistas en público, se invita al público a apreciar el cautivador talento del artista como pintor de la luz.”
“Spanish Light: Sorolla en las colecciones americanas” revela la continua popularidad de Sorolla en este país, que se remonta a los coleccionistas americanos que le apoyaron en vida. Al participar en el Centenario de Sorolla, el Meadows se une a otras instituciones de España y de otros países para introducir o reencontrar al público con la obra de este importante artista.”
Cristina Domenech
PhD in Art History
“El gran público, los coleccionistas y la prensa norteamericana han apreciado la pintura de Sorolla hasta el punto de que Estados Unidos es probablemente el país con mayor número de obras del artista -tanto en colecciones privadas como públicas- después de su país natal”. “Como señaló acertadamente Mark Roglán en 2014: En ningún lugar Sorolla recibió tanto apoyo como en Estados Unidos. El éxito del que disfrutó en este país no tiene parangón con ningún otro artista español hasta la llegada de Pablo Ruiz Picasso (1881-1973).”
“Confiamos en que esta exposición ponga de relieve la calidad de la obra de Sorolla en las colecciones privadas, así como la afinidad y el entusiasmo con que los estadounidenses han recibido y apreciado sus pinturas.”
Vista de la exposición. Foto: Paloma “Hiranda”
CATÁLOGO
Spanish Light:
Sorolla en las Colecciones Americanas
Editor: Blanca Pons-Sorolla
Contribución de: Cristina Domenech
Pata blanda, 88 páginas
$30
Para coprarlo, contacte el Meadows Museum Shop en [email protected] o en 00 1 214 768 1695.
Spanish Light: Sorolla in American Collections es una oportunidad para reunir y presentar imágenes de estas obras privadas incluso después de la clausura de su exposición homónima. Cuenta con una introducción y cronología a cargo de la editora y comisaria de la exposición Blanca Pons-Sorolla, preeminente estudiosa de la obra de Sorolla y bisnieta del artista. La historiadora del arte Cristina Domenech también ha contribuido con un ensayo que ofrece perspectivas sobre la popularidad del artista entre los coleccionistas privados estadounidenses del pasado y del presente, y explora la historia del coleccionismo de las obras presentadas. La investigación para esta publicación se basa en parte en la llevada a cabo para la innovadora exposición Sorolla y América 2013-14 del museo, que también fue comisariada por Pons-Sorolla, y en la que Cristina Domenech también contribuyó con un ensayo.
Esta exposición ha sido organizada por el Meadows Museum.
Una generosa donación de The Meadows Foundation ha hecho posible esta exposición
La promoción corre a cargo del Dallas Tourism Public Improvement District.MEADOWS MUSEUM
5900 Bishop Blvd., Dallas, TX 75205 Tel: 214-768-2516
https://meadowsmuseumdallas.org/